El TNT fue otro de los bares que visitamos en Gijón, era otro de esos bares "punkis", aunque este por música era muy variado. En este bar pasamos gran parte de las noches, tenía cosas muy peculiares, por ejemplo su mini de cerveza que Gorkamorka y S. decían que sabía a oxido, yo no noté nada, ¿Es preocupante doctor?... xD
Pasamos mucho tiempo en aquel bar creo yo, porque nos sentíamos muy comodos, teníamos para nosotros solos a la camarera, Marisa. No voy a decir que era una camarera potente, pechugona, porque es mentira, la verdad es que era bastante normalita, pero tenía algo, lo he hablado con mis compañeros y somos incapaces de decir el que:
Intentamos definirlo como inocencia, pero aquella chica tenía más kilometros a sus espaldas que nadie que conociesemos, 28 añitos, había ido a trabajar durante 4 años a Villareal (Comunidad valenciana) solo porque le habían dicho que tenía trabajo. Lo que más me impactó fue su mirada que en vez de ser dura, y cansada (como suele ser en el tipo de gente que ha visto y pasado mucho) rebosaba felicidad y buen rollo además su cara tenía una sonrisa casi continua
Fue ella quien suplió mi incapacidad manual para liar, haciendome un enorme favor.
En aquel bar conocimos a unos italianos, que habían venido de vacaciones, y sucedió algo curiosisimo cuando su guía, una gallega se acercó a la barra a hablar con Marisa, empezó a hablar con ella en un tono muy bajo y dijo:
- Oye perdona, es que me da mucha vergüenza... no sabrías tu por donde podemos conseguir ...
Y lo último no lo esucché, Marisa le respondió:
- Bueno, ahora no sé, es dificil, quizas por la tarde
Yo estaba descolocado, suponía que buscaban algun tipo de droga, y por como era el bar pensé que o buscaban costo o cocaina. En un alarde de intrusismo total, le dije a Marisa:
- ¿Qué buscan costo o farlopa?
Marisa volvió a sonreir y me dijo:
- Costo
Entonces recordé que tenía yo algunas chinillas en la cartera, y comprendiendo que aquella gente esa noche por lo menos no iban a conseguir, les di 3 ó 4, aquella gente se quedó alucinada, nos invitaron a un mini de oxi cerveza, y al marcharnos, uno de ellos se me acercó y me dijo:
- Muchas gracias, amigo, ¿Tu me entiendes verdad?.
Yo sonreí y le dije que sí.
Otro de los personajes de aquel bar era Paco, era el dueño y el jefe de Marisa, no sabíamos si tenía rollo con ella o que. Tenía bastantes años, era andaluz y llevaba unos 20 años viviendo en Gijón, casi todas las noches cuando llegabamos ya llevaba un pedo considerable, lo que no nos permitió profundizar en él y en su vida. Una anécdota peculiar fue cuando preguntamos donde comer cachopo (plato típico de la tierra del que ya hablaré en otro post) y uno de los parroquianos, el cual era árabe, en un alto estado de embriaguez, nos intentó explicar donde ir a comer un cachopo en Avilés (sin coche a tomar por el culo), y cuando el Paco vio que a nosotros lo de Avilés no nos hacía le dijo:
- Pero si tu eres moro, los moros no comeis de eso (en tono de broma).
Y nos reimos todos.
En ese bar también conocimos a un chico que curraba en el abergue donde dormíamos, y resultó que eramos algo conocidos en el abrgue como los de la 12, los que no tienen que ser despertados.
El último día que estuvimos en Gijón, con una libretita nos cruzamos telefonos y dibujitos de recuerdo con Marisa, cada uno tenemos uno, lo subiría pero es que pone su telefono así que no sé que haré de momento no lo haré, luego veo como queda.
Ese día S. y yo nos agarramos una cogorza monumental, tuvimos que salir ambos del bar un rato a tomar el fresco (por turnos eso sí), y al final nos regalaron un mini de cerveza que no pudimos acabar y que dejamos al lado de un tio que dormía en un banco.
Pues esto fue el TNT.
Salud