Las guerras de mierda... son ese tipo de eventos en el que dos personas que se conocen desde hace mucho, o que han tenido una relación muy intensa, empiezan a sacar cosas y echarselas el uno al otro.
Hay distintos tipos de guerras de mierda, están las amistosas que suelen ser muy divertidas, son esas que sostienes de forma constante con un amigo o amiga especial y consiste en constantemente de manera humorística y muy punzante recordar las cagadas y los trapos sucios de cada uno, en cualquier debate que ambos sabemos no lleva a ningún sitio, pero que hace que nos lo pasemos bien y rememoremos muchas cosas. Este tipo de guerra de mierda la mantengo con Isabel, de forma constante y la echo de menos ahora que está en japon.
Luego están las guerras de mierda totalmente cainitas, cuando la mala sangre aflora, cuando lo podrido que hemos conseguido que no huela durante largo tiempo aparece en nuestras manos, diciendo vengaaa tiraselo, estrellale un buen trozo de ponzoña y de rencor en la cara, sacalo todo, intenta demostrar que tú tienes razón, que quien tienes enfrente es un mierda. Pero no vale la pena, no cura nada, no satisface, solo produce más mierda para tirar, más rencor. Y sobre todo una sensación de ¿Cómo coño hemos llegado a esto?. En ese caso, lo mejor si no eres capaz de librarte de esa mierda, si la tienes en las manos, y no quieres tirarla, lo mejor es darse la vuelta y marcharse.
Así que chavales, a pesar de que la venganza me parece algo a veces necesario, nunca os enzarceis en una guerra de mierda, hay formas mejores.
Salud!